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Esta lucha es por el Gateway Heritage Championship lo que significa que tenemos reglas de lucha pura, es decir, tres ropebreaks por lado. Me es difícil describir una lucha tan extensa, pero en resumen esto fueron 60 minutos de puro talento, una clínica de lucha libre que demuestra que una lucha puede ser muy técnica, absurdamente técnica, y al mismo tiempo ser una lucha de odio, con los roles de heel y face muy bien definidos, acompañados de un público enfervorizado gritando cosas a los competidores. Toda la gente espera que el reinado del terror de Wyatt se acabe, todos quieren volver a ver a Gary de campeón, y lo genial es que esa historia fue contada muy en la onda "yo soy más talentoso que tu" con ambos haciendose una llaves terribles mientras se sacudían por intentar sacársela, demostrándose saberse contrallaves, y con un Gary Jay que sorprendemente evitó ir a los golpes con tal de ganarle a Wyatt al ras de la lona. Eventualmente la acción escaló, Jay sacó de su terreno a Wyatt, lo llevó a los golpes cuando ya estaba agotado y así tomo la ventaja, luego hasta hubo sus secuencias más brawlers y algunas movidas aéreas, pero lo central aquí es ver como ambos se intentaban sacar un hueso de su lugar a punta de llaves o de golpes brutales. Esto tiene de todo lo que se puedan imaginar de una lucha "pura", además de llaveo que ya alabé mucho, hay unas coberturas pero es que para enmarcarlas, una fluidez para sacarse movidas y buscar cubrir, además de unos golpes conectados como si se debieran plata, y por supuesto la tensión de agotar los ropebreaks. Esto es lucha, y respeto a la lucha al mismo tiempo, dos tipos que se odian, un público deseoso de ver un cambio de título después de más de dos años, y todo hecho con la mejor y más prolija lucha libre posible. Excelente combate, superó mis expectativas que ya eran muy altas con esta lucha.
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