Quizá mi lucha favorita de Taker en Wrestlemania, compitendo con la HIAC contra el propio Triple H. Esta lucha es genial porque creo que es la primera lucha donde se enfocaron en que el Undertaker ya estaba viejo para esto, y Taker en respuesta sale a dar una brawl de los mil demonios, ataca a Triple H hasta llevarlo al ringside, Triple H como buen rudo y conocedor de esa zona, aprovecha de darle con la escalera, estrellar a Taker con las barreras, todo lo que pueda, hay una especie de Spine Buster sobre la mesa, que es sencillamente brutal, se sintió muy natural, Triple H no alcanzó a posicionarse ni dar el giro completo, se sintió como un reversal real, no como algo muy coreografeado. La lucha se sigue basando en que Triple H castiga a Taker y este vuelve y vuelve furioso del más allá, sentándose y golpeando, pero esta vez Taker esta algo más cansado, ya no es la máquina de guerra que peleaba de igual a igual contra Shawn Michaels, por lo que cada comeback se siente emocionante, un esfuerzo enorme de buscar las rendiciones y las movidas finales, que Triple H resiste para dejar loco al público, pero sólo para seguir acercándose a su inevitable caída contra el hombre muerto que simplemente fue el que más resistió en el combate, el final es extremadamente épico, la visual de Taker aplicando las Hell's Gate mientras Triple H toma el martillo pero ya no tiene fuerzas y se le cae es un final increíble, el clímax del drama que tanto busca WWE en sus luchas. Gran combate, un clásico.
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