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Esta lucha fue un espectáculo bizarramente entretenido, y dudo que se pueda crear algo así en un ring fuera de México, quizá difícilmente fuera del show demente que es AAA. La AAA es una agrupación que desde hace 5-6 años en general hace todo mal, incluído esto, pero tiene luchadores dispuestos a morir en un ataque aéreo o un spot hardcore digno de la peor garbage wrestling de Puerto Rico en los años 80, y ese caos de repente genera maravillas, pero esta sí que no tenía por donde y resultó. Todos sabemos que Wagner conserva la máscara, pero aún así le dieron una emoción brutal a esto. Wagner tiene todo en contra, todo, el árbitro es rudo, Máscara Año 2000 padre interviene en la lucha todo el tiempo, en menos de 2 minutos ya es un dos vs uno, Máscara está enterrándole un tenedor en la frente a Wagner, el árbitro ignora todas las trampas, no permite que Silver King suba al ring, y el Hijo del Dr. Wagner Jr. duda si meterse o no. Su padre está sangrando, lo golpean entre dos, el árbitro lo ingora, el manager no hace nada, y aún así el Hijo del Dr. Wagner Jr. duda si debe romper las reglas. Más encima, por si esto fuera poco bizarro, los relatores rudos se ponen a pelear a gritos con él sobre que debe quedarse en su asiento. Wagner es una masa sanguinolienta, y en medio de todo el caos logró hacer un comeback creíble. Me sorprende que una lucha donde hay como 10 personas involucradas y caos por todos lados, Wagner vendió excelente la paliza que recibió, la visual del loco sangrando hasta por los codos, moviéndose como zombie y sacando bombazos y coberturas de la nada fue increíble, con la gente gritando a cada conteo de 2, que obviamente eran lentísimos porque el Copete Salazar contaba a medio centímetro por hora. Por si fuera poco, Silver King se aburre y entra pero traiciona al Dr. Wagner, y le da un sillazo. Con 3 personas más el árbitro atacando a su padre, el Hijo del Dr. Wagner decide que es prudente intervenir. A estas alturas la lucha, la arena, y la existencia humana en general, es un desastre, la gente tira comida al ring, en realidad tiran lo que encuentren, le lanzan bebidas a los rudos, palomitas, alguien enmascarado interviene desde el público y ya ni recuerdo que luchador era, en serio se me olvidó y ni recuerdo si el relato lo mencionó finalmente, no sé como cresta nunca se ha lesionado de gravedad un luchador o el público en estos líos, bueno, quizá ha pasado y no lo sé. Wagner recibe una botella a escondidas de su hijo (porque claro, hay que cuidarse que nadie vea que hacemos trampa en esta lucha), y le da un botellazo a Máscara para la victoria. De alguna forma, la suma de muchas estupideces creó un espectáculo memorable e inolvidable, yo sé que hay gente que encuentra que esto no fue una lucha, sino una pelea de bar mayúscula puesta en un ring sólo porque sí, pero disfruté TANTO esta wea, no recuerdo un sólo segundo en que me aburrí o me distraje, esto fue épico para mí.
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