Al fin. Hace años que las Chambers están muy lejos de sus primeras ediciones, en buena parte, o en parte completa por culpa de WWE y su manía de repetir estipulaciones todos los años y desgastarlas. De hecho las únicas que recuerdo post 2010 son la de Shayna, y creo que la de Daniel Bryan con Santino al final. Esta Chamber siento que devolvió la idea de peligrosidad y emoción de las primeras, que se caracterizaban por spots violentos y creativos, y la emoción de las eliminaciones para ver quién quedaba al final. Esta lucha fue exactamente eso, ya que al ser por un título intermedio, estaba presente la opción de cambiarlo (sumado a que con Theory han usado un bookeo de altos y bajos en kayfabe), y de innovar con quienes iban quedando al final. Además el conjunto de luchadores estaba bastante dispuesto a morir de formas novedosas y creativas, siendo Montez Ford el Shelton Benjamin de esta lucha, usando las cabinas y paredes de la Chamber para inventar nuevas formas de lanzarse una y otra vez sobre sus rivales. Mi MVP personal del combate es Bronson Reed, un luchador que hasta ahora en WWE sólo lo han hecho debutar básicamente y acá al fin tuvo opción de mostrar sus quilates siendo además el único powerhouse de la lucha y además el primer eliminado, que siempre es un rol ingrato, pero acá lo dejó bastante over, usando el clásico recurso de que destruye a todos sus oponentes, y al final estos se deben unir para eliminarlo. Encontré que todas sus movidas se vieron brutales y tenía los rivales ideales paraestarlos arrojando contra las cadenas y levantándolos incluso de a dos a la vez. El final es muy bueno, como usan la camilla para dar una excusa para abrir la jaula, la entrada de Logan Paul para arruinar a Rollins, todo muy bien hecho, aparece todo en el momento justo y se siente un final satisfactoriamente frustrante. Muy buena lucha, bien bookeada, arriesgada, lo que uno esperaría de una Chamber y hace años no se obtenía.
¡Sígueme en Twitter para que sepas cuando publico algo nuevo.