Esta es la mejor lucha de Okada desde el 2017, y lo mejor que he visto de NJPW en años que no sea una lucha de humor, una estipulación rarísima o en Estados Unidos. No tengo mucho más que detallar aquí, salvo lo esencial, Okada se enoja con Kaito en una secuencia, lo intentaron vender como que se picaron de verdad por una patada de Kaito en pleno hocico de Okada, y los dos van a golpearse sin asco al ringside hasta casi matarse por más esfuerzo que hace el árbitro por separarlos e ignorando completamente la lucha de sus compañeros en el ring. Es lejos lo más brutal que le he visto a Okada luego de años donde pensé que sólo podía pegar bien las dropkick, y al fin Kaito se ve como el main eventer de NOAH que debiese ser. Excelente todo esto.
¡Sígueme en Twitter para que sepas cuando publico algo nuevo.