Para los que no lo saben, la Dead or Alive es una lucha de apuestas que hace Dragon Gate, la cuál es en jaula, y hay que sacar unas banderas para escapar. Lo normal es que el último pierda la máscara o la cabellera, pero a veces cambian estas reglas, por ejemplo este año el último pierde algo dependiendo del luchador (Big R Shimizu pierde el nombre, YAMATO debe alisarse el pelo, BxB Hulk partir desde cero de abajo en la cartelera, etc.), y además el primer que salga gana algo, lo único importante a saber, es que Kai, si es que es el primer en escapar, debe unirse a RED (es stable heel de Dragon Gate), por lo que en los primeros minutos no quiere salir antes que no salga otro. Eita y Shimizu son parte de RED. Listo, con esa información pueden disfrutar eso, es una locura total, los equipos de todos tienen derecho a ayudarlos desde afuera y para eso usan armas muy creativas, hay intentos de escalar por doquier, spots desquiciados dentro del ring y una historia dramática con Yoshino contra RED en los minutos finales. Hay violencia, diversión, emoción y todo lo que uno podría querer. Mi momento favorito es cuando usan CUERDAS para escapar porque así no les pueden llegar los proyectiles que lanzan desde afuera de la jaula. Esta lucha siempre es de lo mejor del año y acá no fue la excepción, quizá no tuvo el nivel de drama de el año antepasado o el 2017, pero fue una versión más compacta y con acción más constante así que creo que es hasta mejor para alguien que no ha visto nunca este tipo de combate.
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