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Cómo no amar a Mei Suruga, es increíble que desde tan chica tuviese un sentido tan grande de la sicología y contar una historia. El Joshi está lleno de luchadoras jóvenes talentosas, pero Mei realmente destaca, tiene un balance entre ser divertida y contar una historia que siento que casi nadie tiene. Acá tiene una rival que es una de las mejores luchadoras de la historia, lo que la hace ver ya exponencialmente mejor de lo que ya es. La lucha es simple, y eso la hace perfecta, Mei opta por correr y gritarle a Bolshoi, lo que la descoloca, y le permite aplicarle varias movidas en velocidad, hasta que Bolshoi la frena en seco con una Knee Bar. Mei se recupera e intenta buscar más movidas o coberturas, pero Bolshoi vuelve y vuelve a la pierna hasta que finalmente logra derrotarla. Me gusta, porque la superioridad de Bolshoi es innegable, bastó un espacio para que dominara por completo a Mei, pero a la vez el esfuerzo de Mei es notable, hace sentir que logró peleársela a una de las mejores de la historia.
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