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Esta es una lucha tan minimalista como buena, y es candidata a ser la mejor de toda la historia de la compañía. Bret y el Bulldog tienen un evento estelar en Inglaterra, el ambiente y la ocasión es soñado, único e irrepetible e hicieron una lucha pura basada en llaveo muy “back to the basics” con pequeños detalles más modernos que hicieron de esto algo inolvidable. La historia dice que Davey Boy Smith venía por meses luchando contra sus demonios y la depresión por su próxima suspensión de 6 meses por esteroides, la que sería efectiva al poco tiempo luego de esta lucha. Bret planeó por meses el combate para decirle a Davey todo lo que tenían que hacer sólo para que éste culposo y triste le dijera que se le olvidó todo. Bret prometió cargarlo durante toda la lucha, con ayuda del árbitro, y de alguna manera generó una obra de arte. La historia de la lucha es que Bret se vio superado por Davey en el terreno técnico, sufrió llaves al brazo, dormilonas, sin poder escapar, y tuvo que recurrir a recursos al borde de la rudeza como ayudarse con las cuerdas, o lanzar a su rival fuera del ring, lo que la gente odió. Como diría Bret, tenía que ser lo suficientemente rudo para que la gente apoyara al Bulldog, pero no tanto como para que lo perdonaran al final del combate y mantener su aura. De paso el combate fue lo suficientemente parejo para dejar fuerte al Bulldog, pero sin dejar débil a Bret. Más allá de una que otra rudeza, Bret contraatacó con movidas que deben ser de las más perfectas de su carrera, prácticamente cada agarre de Bret es para ponerlo en un marco, especialmente el German Suplex y cada cobertura que hizo buscando la victoria de la nada, mientras que el Bulldog de a poco empezó a aplicar sus movidas de poder, volviendo a su estilo, las que se vieron brutales. Ahora pienso que puede ser que producto de su momento de vida complicado anduviese menos prolijo y todo se veía más violento, pero como sea ayudó a que aumentara el drama de la lucha. El final consiste en un luchado Superplex y luego ambos cansados y adoloridos desesperados por buscar una cobertura que termine este combate. El Bulldog gana con una cobertura casi de suerte, cuando nadie esperaba un final. Después del concierto de Queen, este debe ser el mayor espectáculo que ha visto el estadio de Wembley.
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