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Qué lucha, dos regresos al Wrestling Open, pero en contextos muy distintos, Amira anduvo en Japón, y Allie vuelve de una lesión, se topan y de la nada (a menos que me haya perdido de algo), tienen una lucha competitiva donde ambas llevan a la rival a sus límite y más allá. Me encanta que se nota el viaje de Amira, siempre admiré mucho sus luchas técnicas, pero no le había visto una lucha “de poder a poder” así, llena de secuencias de golpes de ida y vuelta, la secuencia de patadas a la espina es buenísima, pasan a los bombazos, hay movidas desde el poste, Amira recibe un Superplex, y luego responde con una tremenda Samoan Drop. Ambas están bien agotadas y dañadas, la gente agradece el esfuerzo, y proceden a buscar una movida de desesperación botando de cabeza a la rival, la diferencia de tamaño hace ver tremendo los German Suplex y sus variantes que aplica Amira. Ninguna quiere ceder, y buscan coberturas rápidas lo que nos da una hermosa secuencia que culmina en un Backfist de Amira para una creíble cuenta de 2,999. Ambas se levantan como dos personas que fueron a una guerra, y se tiran todo lo que les queda hasta que Allie cierra esto con un Piledriver. Es un evento estelar de dos powerhouses así pero de la nada, que impresiona porque hace mucho no veíamos luchar así a Allie, y en Amira es algo nuevo y además impresionante por la fuerza que tiene para su tamaño. Excelente lucha.
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