Estos dos ya llevaban un par de tremendas luchas en el año, pero esta fue la que se llevó los aplausos para mí. Strowman se había visto más ágil, más fuerte y más monstruoso y acá entró a aplastar al Big Show, de hecho el principio de la lucha hacía pensar en una victoria rápida y aplastante, pero el Show aún tiene algo que decir antes que retirarse. Me encanta Strowman, pero esto fue el show del Big Show (sí, el show jaja que gracioso soy), su rol de “aún me la puedo” fue increíble, cada golpe de KO de la nada, cada garra usando toda la fuerza del mundo para levantar a Braun, y el excelente timing que tuvo para hacer movidas impensadas como el codazo biónico o intentar escapar escalando fue notable, he visto muchas luchas en jaula con spots aéreos, y el Big Show se las arregló para que ambas cosas se vieran lógicas, como que llegó a esa situación por las circunstancias y no era una estrategia. La gente se compra el drama y se vuelca en favor del Big Show, y el final es realmente emocionante, ya que dada la naturaleza física de ambos siempre parece que la lucha fuese a terminar luego, o siempre parece que una movida no la van a hacer realmente pero cuando la ejecutan es impresionante. Strowman ganó el feudo, pero esta fue lejos la lucha más pareja que tuvieron y donde el Big Show demostró que al menos por una noche podía ser un monstruo dominante y recibir y hacer movidas impresionantes para su humanidad. De hecho, el final post-match es bastante bueno para dejar a Strowman como una fuerza dominante, y no como el “que le costó ganarle” a alguien más viejo y lento. Gran lucha, agradezco que haya existido este feudo el 2017.
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