Lucha con una intensidad brutal incluso para ser estos dos. Empezamos con ataques aéreos al tiro y tenemos nuestra batalla de resistencia entre dos locos tratando de matarse de todas las formas posibles, Lee domina mayormente con su lucha aérea intentando llevar el caos al ringside, mientras Hiromu contraataca con patadas y bombazos de la nada, prácticamente no hay una sola movida normal en la lona, todo es contra el piso, de cabeza, o volando. La gracia de estos dos es que aunque hagan mil cosas bonitas, todas se ven como si dolieran, cada tope suicida de Lee se ve como si dañara al rival en el proceso, se ve doloroso, no como las movidas aéreas de los Bucks o Rollins (aunque ha mejorado en ese aspecto), los dos parece que fueron a la guerra a la mitad de la lucha y no se ven frescos y felices de saltar, tienen el talento de ir ejecutando las movidas cada vez más lento, dándole un aura de credibilidad y drama al dolor y cansancio que enfrentan, no hay tiempo para andar celebrando y gritando tonteras como el Bullet Club, Takahashi gritándole COME ON a Lee parece un demente que ya no puede recibir más castigo y está cayendo en niveles serios de masoquismo, en cambio Scurll o Adam Cole cuando hacen ese tipo de cosas parecen locos jugando a la lucha libre con amigos. El clímax de la lucha llega forzadamente cuando Lee casi mata a Takahashi en un Package Suplex, o Cubo Rubik, como quieran llamarlo. No soy experto pero en la repetición en cámara lenta se ve que Lee suelta a la mitad del camino a Takahashi como siempre lo hace según yo, por algún motivo Takahashi no alcanzó a dar el giro completo y su cuello se arrastró por el ring. Preocupado por la salud de Takahashi, Lee le da un bombazo giratorio, y preocupado por su propia salud, obviamente Takahashi hace una Canadian Destroyer. Estos dos están locos. Finalmente gana Takahashi con la Tickling Time Bomb. La gracia de estos dos, y de Kushida por nombrar a alguien más, y lo que los hacía épicos además de ser unos dementes que violan las leyes de la física, es que sus luchas siempre fueron al revés, partían con una serie de spots enfermos y terminaban con llaves de rendición que se veían brutales luego de todo lo que habían pasado. Últimamente les han quitado un poco esa magia, y aquí desapareció completamente, aunque puede ser por la lesión de Takahashi, así que no quiero ser tan cruel, mal que mal el final se vio apurado, sin embargo dudo que tuviesen planeado algo bonito como esa lucha ya legendaria en Fantasticamania. Aún así, son tan buenos los dos que haciendo un spotfest son mil veces mejores que todos los que intentan hacer aquello en las agrupaciones mainstream. Muy buena lucha.
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