Nuevamente tengo una frustración de que esto pudo ser épico, pero fue una tremenda lucha, o más bien experiencia. Hicieron todo bien. Braun salió antes a decir que iba a retar al que ganase, lo que generó un ambiente de incertidumbre que caló hondo en los miles de fans que iban dispuestos a “hackear” esta lucha y a cambio tuvimos un caos gigantesco. Eso ya que luego de ello, lo primero que pasa son las lanzas de Reigns, la gente cree que esto puede ser un Goldberg vs Lesnar II y entre las puteadas, gritos de emoción, insultos, etc. se forma una catarsis de que aquí todo puede pasar, lo que pocas veces se genera en la lucha libre y menos en WWE. Los dos intentos de Kimura de Lesnar también dejan la embarrada en el público, y finalmente encontré brillante a Reigns y Lesnar matando a Strowman de la nada para evitarse problemas luego de la lucha, más aún que esto distrajera a Lesnar para permitir que, al fin, Reigns logre dejarlo como pollo y ganarle con una lanza inapelable. Si los spots en el ringside y la sangrada de Reigns hubiesen sido en esta lucha habríamos tenido un clásico tipo Hashimoto contra Ogawa, pero ya no fue, siempre recordaré esto como el feudo que pudo haber sido. Aún así disfruté esto a concho, muy pero muy buena lucha llena de emociones más que cualquier otra cosa.
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