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Si han leído este blog alguna vez, y volvieron, sólo puede significar una cosa: van a amar esta lucha. Ya no sé como más describir una lucha virtualmente perfecta de Thatcher. Esta es la tercera entre ambos en 3-2-1 Battle, van 1-1 y acá se define quien es mejor, y se hace golpeándose y llaveándose de la forma más brutal posible. Thatcher no tiene piedad y va directo a intentar cerrar el combate desde el comienzo buscando alguna extremidad de Makabe para rendirlo. Makabe esquiva todo, mete sus golpes cuando puede, e intenta capturar también alguna extremidad del rival sin mucho éxito, pero si lo suficientemente consistente como para enojar a Thatcher, y que éste sea el primero que va a los golpes con unas patadas de la puta madre. Ahí la lucha se abre y se pone más pareja, con los dos golpeándose como locos y metiendo grapples en medio de esto, unos Saito Suplex de miedo de lado y lado, y Makabe de a poco buscando el camino para su variante de Cattle Mutilation. Los segmentos de Makabe golpeando la espalda de Thatcher para cerrar la rendición son de una emoción suprema, con la tensión de que Thatcher en cualquier momento le agarra un brazo y fin del asunto. Cuando Thatcher toma la cuerda en la primera Cattle es más emocionante que una caída falsa. Luego de recibir varios golpes que asesinarían a un dinosaurio, Makabe logra conectar a Thatcher hasta doblegarlo y atacarle la espalda para darle la rendición mas enferma que haya visto. Es un final perfecto para la triología, hay millones de pequeños detalles de la lucha que se van al olvido, como la eterna búsqueda de Thatcher por conectar una patada tipo enzugiri o Makabe y su esfuerzo por conectar con el puño cerrado que irónicamente le impidió cerrar las coberturas porque le dolía mucho la mano como para tomar el hombro o una pierna. Esta lucha de hecho creo que se puede revisitar infinito y siempre encontrar algo nuevo. Lo hicieron, lograron una serie candidata a la mejor del año.
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