Amé demasiado esto, y de repente siento que puede influir llevar casi un año de pandemia, porque siento que este tipo de espectáculo se siente lejano e irrepetible. Esta lucha es una tocata, la gente está TODA DE PIE desde antes de que empiece la acción, todos esperan una brawl de los mil demonios, y eso es lo que reciben. Gage y Wyatt se odian y tienen una lucha por todos lados tirándose sillazos y golpes directos, con acción muy divertida y violenta, hasta hay una secuencia en que tiran sillas al ring y pese a que Gage anima al público, el staff tiene que pedir que por favor no arrojen sillas para que no pase nada grave jajajaj, Gage estrella a Wyatt en sillas que sostiene la gente, Wyatt se defiende con su lucha más técnica, con derribadas y suplex, hay movidas brutales sobre las sillas, y un excelente final con Wyatt intentando a esposar a Gage de la forma más natural que he visto en la lucha libre en mucho tiempo. Por la cresta, necesito que se acabe el virus para ver una locura así. No puedo dejar de destacar que la lucha no tuvo sangre y el ambiente, si bien era una caldera, no deja de ser propio de un público bastante diverso y familiar, lo que demuestra que se puede hacer algo extremadamente violento sin que sea peligroso o se pase de la raya, y por sobre todo, que se sienta más entretenido que ir a Fantasilandia. Con esto no quiero decir que la lucha super sangrienta y gore sea mala, sino que se puede lograr una tremenda lucha violenta, con todas las de la ley, pero en otro estilo, y eso sólo demuestra que estos dos son muy buenos.
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