Para sorpresa de nadie, esto fue una carnicería completamente irresponsable y por lo mismo maravillosa que se siente como el epítome del entretenimiento deportivo. Es un espectáculo realmente cautivamente, desde que Psycho entró con su música antigua que sentí que podía llevar la violencia a un nivel más allá, aunque igual entró acompañado de niños con su máscara, para luego proceder a sangrar y hacer sangrar a su rival como un océano completo. Como buen ícono e ídolo de los niños, Psycho nos demuestra que no basta con romper la máscara y dar puñetazos para ganar, también hay que recurrir a las sillas y las mesas, y si no es suficiente, sacar tachuelas. Mientras escribo esto siento que realmente todo calza tan bien con un payaso sicópata, desde ganarse a las familias hasta llevar todo a la violencia extrema, quizá Psycho es una obra de arte que no he llegado a analizar en toda su magnitud. Por lo demás Villano es un nivel de detonamiento que llega a dar miedo, los golpes que da este caballero dios mío santo, se enterró tachuelas en las manos casi que por error, y no le importó nada, cuando se siguió agarrando a combos con Psycho las tachuelas saltaban por los aires, una visual realmente fascinante, una absoluta locura. Ahora mi problema es como ubico esta lucha entre las 3 mejores del año, porque hasta me cuesta decir si es mejor esta o la que tuvo con LA Park. En fin, un clásico instantáneo sin duda.
¡Sígueme en Twitter para que sepas cuando publico algo nuevo.