Le tomé cariño a esta lucha porque siento que fue un Casket Match respetando la tradición de este estilo de lucha en WWE, con todas las ridiculeses que implica, y es lo mínimo que esperaba de un Halloween Havoc, dos tipos luchando por encerrar al otro en un ataud, centrados en ellos, en lugar de hacer una lucha violenta y que al final cayeran en el ataúd y ya. De hecho, siento que integraron bien todo, porque hubo referencias al Undertaker, se destruyó un ataúd, entraron los monjes con un ataúd de repuesto, me encanta lo previsores que son los monjes, y por cierto, el ataúd de repuesta estaba reforzado, alguno de los monjes debe ser carpintero y otro herrero. Pero bueno, además de todo esto, hubo spots derechamente brutales, sobre todo al borde del ring, cerca del ataúd, y que una lucha sea así de entretenida llena de elementos distintos se agradece mucho.
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