Esta lucha es muy simple. Si te gustan los eventos estelares de Okada, esta lucha te va a gustar, sino no. Pasa todo lo que te imaginas que va a pasar, tienen una secuencia inicial con llaveo que termina en un intento de count out y que después no va a tener influencia alguna en la lucha, de verdad podrían haber partido la lucha buscando los trademarks y no cambiaría nada de nada. Luego vienen secuencias de patadas voladoras y golpes con el puño cerrado que termina con alguien cayendo de cabeza sobre el borde en el ring, y al final ambos buscan y conectan sus trademarks varias veces, con muchos conteos de dos hasta que Okada logra ejecutar de nuevo y varias veces seguidas el Rainmaker. Ahí tienen mi review de Okada vs Ibushi, Okada vs Naito, Okada vs Sanada, Okada vs White, en fin. A menos que tenga un rival muy distinto como Tanahashi o MiSu, siempre es la misma lucha. El talento que tienen para hacer una secuencia final dramática es innegable, de hecho, a pesar de lo repetitivo, aún me entretiene, y los golpes con el puño cerrado de Ibushi me dejan tiritón, pero con el pasar de los años, una lucha que antes encontraba “de lo mejor del año” ahora la encuentro ligeramente entretenida, y supongo que en un año más ya la encontraré fome. Como sea, la gente sigue disfrutándola mucho, y la apuesta lógica es pasar de Okada a Naito, por lo que no habrá mucho cambio en el estilo de lucha que proponen los eventos estelares de NJPW.
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