Esta es la típica lucha de NJPW que pudo ser buena pero duró como 50 mil minutos y tuvo 80 billones de spots brutales que hicieron totalmente olvidable los del comienzo (nunca había visto un DDT en el ringside tan irrelevante, recuerdo cuando los fans casi crucificaron a Cena por levantarse y volver al ring luego de un DDT en el ringside en un Summerslam). Además, la capacidad de Ospreay para vender el castigo se siente nula al lado de Shingo, y eso que mostró progresos, pero sólo Shingo me hacía creer que estaba viviendo una batalla, Ospreay siempre me parece más preocupado de no errar la coreografía. Oh well, Meltzer le dio 8 estrellas supongo, pero no me pueden gustar esta forma de hacer spotfest.
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