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Esta lucha fue una experiencia, y debe estar fácil entre las cosas más violentas y descriteriadas que se han hecho en un ring, y al mismo tiempo, es una excelente lucha. En serio, si lo tuyo no es el hardcore, hay que darle una oportunidad a esta lucha. Este es un combate con “Gusset Plates” alrededor del ring. Las Gusset Plates son unas tablas con fierros con puntas que se usan para hacer puentes, se encajan entre sí. De alguna forma, alguien en CZW es lo bastante enfermo, loco, o tiene el suficiente tiempo para buscar los objetos cortopunzantes más peligrosos del mundo, y descubrió que estas placas de metal que se encajan tienen unas puntas metálicas que dejarían como manzana rayada a cualquier persona. Obviamente cualquier objeto que sea un arma blanca debe convertirse en una estipulación de CZW, y así llegamos a esta lucha con unos mecanos con puntas metálicas afiladas alrededor del ring. Me encantó como manejaron el combate, tuvo ese ambiente de lucha No Rope Barbed Wire, pero renovada, como si volvieran a ser los 90 y estuviéramos aterrados de que un luchador va a tocar las púas. Jamás habíamos visto a un luchador (o a nadie en verdad), tocar una Gusset Plate, de hecho me pregunto si en la historia de la humanidad alguna vez alguien se habrá cortado con estas cosas. La incertidumbre se responde con los primeros contactos de MASADA y luego de Havoc, que nos hacen descubrir que basta un pequeño golpe para que queden sangrando como regaderas y con cortes que parece requerirán puntos. Fueron hábiles en tomarse la acción con paciencia, vender todo el daño que les producía estarse desangrando e ir de a poco haciendo cosas cada vez más brutales. El premio se lo lleva Havoc girando las púas para atacar a MASADA en el borde del ring, y el propio MASADA enterrando el brazo de Havoc en las puntas con el close-up más gore que he visto en siglos. En serio, es que qué diablos, la piel de Havoc realmente cuesta que se despegue de las puntas, sólo los clavos de faquir que usa Abdullah Kobayashi se comparan a esto. Cuando uno cree que nada puede ser más demente, todo se va a la mierda, y vemos bombazos y hasta Dragon Suplex sobre esas placas que hicieron sangrar profusamente a ambos con un pequeño contacto y ahora se hacen maniobras que ya serían dolorosas sobre una superficie normal. Cuando ya no hay límites morales en este planeta, Havoc se desespera y usa un trozo de Gusset Plate como arma y hace explotar en sangre el brazo de MASADA. No sé si he visto spot más espectacularmente gore en la vida, es como una pelea de animación japonesa, la sangre simplemente explotó como si hubiesen pinchado un globo, MASADA parece regadera, no se detiene, la gente grita horrorizada y los relatores piden que la lucha se detenga en una exclamación que sonó como si estuviesen rompiendo el kayfabe. En medio de todo este caos e inseguridad de que algo salió mal, MASADA no sólo se sacude al conteo de 2, sino que es capaz de recibir un Death Valley Driver, sobrevivir, y dar vuelta la lucha y llevársela con la gente extasiada, coreando CZW y a la vez espantados. Para mí toda esta experiencia es perfección, o muy cerca de ello, no criticaría a nadie que le de 5 estrellas a esta lucha y creo que estoy en ese equipo, o muy cercano. Por otro lado, no culparía a nadie que me dijera que esto está mal, que la lucha libre no puede cruzar cierto límite y esto ya es dañar cuerpos excesivamente. Sinceramente, no tengo nada que decir ante ese argumento muy Jim Cornette, ya que no puedo pedirle a nadie que arriesgue su salud inútilmente, o que disfrute de ver aquello, pero en fin, estos dos lo hicieron, y el resultado fue una de las mejores luchas violentas de toda la historia. Confíen en mí y vean esto aunque el deathmatch no sea lo suyo.
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