Esta lucha fue difícil, el show llevaba más de cuatro horas, y el público, en su mayoría, ya tenía otro show en el cuerpo, o más de uno contando días anteriores. Venían de un royal rumble de como 500 personas, pero Tremont tuvo una excelente lucha de retiro aquí. Esta es su última lucha en GCW antes de su retiro, y la lucha estuvo centrada en que Tremont se negaba a morir y en sorprender con varios momentos del tipo "aún se la puede" con duelos de tubos fluorescentes en la cabeza, duelos de golpes, spots que podrían ser de dos luchadores jóvenes en las sillas del público y en mesas, y cada vez que parecía que ya estaba acabado, un conteo de 2 encendía a la galería y la gente se ilusionaba. Es extraño sentir que la duración de hecho ayudó a que la lucha se sintiera especial, pero así fue, Tremont no sólo sobrevivió a todo, sino que hizo varias movidas inesperadas cuando ya estaba muy dañado, y al final Colon tuvo que sudar la gota gorda y asesinarlo y re asesinarlo como con 500 mil tubos para poder terminar esto. No soy muy fan de Colon normalmente, es un luchador más de preparar grandes spots muy coreografeados en deathmatches, pero acá tuvo una lucha donde lo central fue la historia, el drama, y salió muy buena.
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