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El hecho de que André, ya viejito y lleno de enfermedades, tuviera un buen feudo con el Ultimate Warrior, me parece más que suficiente argumento para plantearse que es el mejor de todos los tiempos. Esta lucha fue escogida, de forma incomprensible, la peor lucha de 1989 por los lectores del Observer. La lucha es absolutamente genial, es como estar jugando Dark Souls con un personaje que sólo le has puesto stamina e ir a enfrentar a un jefe final gigante. Lo mejor de esto debe ser que el Warrior lucha como si no hubiese diferencia de tamaño, intenta hacerle dormilonas a André, y todo sale mal, le tira golpes al aire como si estuviera bajo los efectos de algo (bueno, vaya a saber uno), y hasta le hace un BEARHUG a André en el momento más desquiciado de la lucha. En medio de toda esta locura, André contraataca a punta de cabezazos y con su propio abrazo de oso y tiene una cara de odio al Warrior que es simplemente genial, aborrece la osadía de este drogado que no se le acaba la pila, y en medio de todo esto, el Warrior logra conectar dos puñetazos pero que son claves, es como David vs Goliat, envía a André al piso y luego, logra dejar a André atado en las cuerdas. El final es una locura, el Warrior se lanza contra André mientras el árbitro intenta sacarlo, golpea a Heenan, André se libera y el Warrior lanza a Heenan como si fuera un arma sobre André, lo que nos deja la DQ, pero poco importa, el ambiente de esto es nuclear. Esto es lucha libre.
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