De esta lucha esperaba entretenerme mucho, y así fue, estuvo tremenda, fue un combate asquerosamente lento e impreciso, dos viejos agarrándose a combos porque se pusieron a pelear ebrios sobre si era mejor Martín Vargas o Mike Tyson o qué se yo que diablos, pero dan un espectáculo tan malo que llega a ser bueno porque de verdad que se desgastan a más no poder para poder golpear al otro, todo es horrible como debe ser, es una lucha que atormentará las pesadillas de los puristas y que me hace feliz imaginar a Meltzer teniendo que ver esto para esperar el evento estelar de los Bucks. Ahora bien, yendo a lo importante, porque como si no bastara con la brawl mostrada, acá lo esencial es cerrar muchas historias que deben significar mucha ansiedad para un fan de la lucha mexicana, ya que en primer lugar, Blue Demon padre le quitó la máscara al Rayo de Jalisco padre, así que hay un deseo de venganza, y en segundo lugar, el único momento exitoso de la carrera del Rayo Jr. fue haber recibido un guitarrazo del porte de un buque en la cabeza cuando se enfrentó a Cien Caras por las máscaras, y al final de la lucha aparece Cien Caras, en muletas, a distraer a su viejo rival para que sus hijos repitan la historia. Sin embargo, Rayo de Jalisco Jr. con 62 años logra esquivar y contraatacar a los TRES miembros de la nueva generación dinamita como si fuera una película de John Wayne, y más encima les quita la guitarra y se la explota a Blue Demon en la cabeza cerrando 30 años de ansiedad de una vez por todas y ganando este combate sólo para ser masacrado por los Dinamitas, que de paso también le pegaron a Demon, demostrando que son rudos de 5 estrellas y gran turismo. Esto fue un momento histórico para mí jajaajjaja fue muy surrealista, no puedo sino tenerle cariño al combate.
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