Estas dos tienen a su haber una de las mejores luchas de Joshi de esta década y creo que acá estuvieron a la altura. La lucha es distinta a la paliza que le propinara Miyu a Mizuki anteriormente. Mizuki se ve más madura en el ring, más cuidadosa, más consistente en sus ataques, y no una bala perdida como antes buscando la victoria desesperadamente desde el inicio. Esto hace que la lucha tenga un ritmo más pausado y harto estudio para ir metiendo patadas o ataques aéreos. De a poco Miyu logra la ventaja con sus patadas de siempre, pero los castigos y rendiciones que ha logrado meter Mizuki la van ralentizando de a poco, y así mismo empieza a meter unos spots brutales de la nada, un suplex al esquinero y unos pisotones dignos de algún aéreo demente del CMLL, increíble que Mizuki es pequeñita y se sienten brutales sus ataques. Mizuki está complicada, debe enfrentar rendiciones y coberturas complejas, pero al mismo tiempo una patada de KO de ella pareciera que va a acabar la lucha siempre, no importa en que situación se enfrente, es casi como una lucha de MMA en que sabes que un golpe bien conectado termina todo sin importar lo demás. Los rodillazos a la cabeza para llevar a Mizuki al poste lo encontré una secuencia espectacular. Los minutos finales son de locos. Increíble lucha.
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